1. Control y Regulación: Las válvulas industriales controlan el flujo de agua y de los productos químicos de tratamiento durante todo el proceso de purificación. Regulan el caudal y mantienen los niveles de presión correctos dentro del sistema, lo que garantiza que cada fase del proceso de purificación se lleve a cabo en condiciones óptimas.

2. Aislamiento y seguridad: Las válvulas proporcionan aislamiento para tareas de mantenimiento, cierre de emergencia e integridad del sistema. Pueden aislar secciones de la planta de purificación para tareas de mantenimiento o en respuesta a una falla del sistema, lo que evita la contaminación y garantiza la seguridad del suministro de agua.

3. Precisión en el tratamiento químico: En las etapas de purificación del agua que requieren un tratamiento químico, como la desinfección o el ajuste del pH, las válvulas garantizan la dosificación precisa de los productos químicos. Esta precisión es crucial para un tratamiento eficaz y para mantener el equilibrio de las concentraciones de productos químicos para evitar un tratamiento excesivo o insuficiente.

4. Prevención de reflujo: Ciertos tipos de válvulas industriales, como las válvulas de retención, evitan el reflujo, garantizando que el agua purificada no se mezcle con agua no tratada o productos químicos, manteniendo así la integridad del agua purificada.

5. Durabilidad y confiabilidad: Las válvulas que se utilizan para purificar el agua deben soportar sustancias corrosivas y presiones y temperaturas variables. Se suelen utilizar materiales como el acero inoxidable, el PVC y otros materiales resistentes a la corrosión para mejorar la durabilidad y la fiabilidad.